domingo, 10 de julio de 2011

Cuna de versos



Extrañaré este sitio
y el baldosín de colores,
la puerta doble y blanca
que se abre extensa como
las alas de una gaviota.

Anhelaré este cuarto,
y la inspiración invisible
que en sus esquinas reposa;
los besos que aquí me dieron,
las copas que se quebraron.

Aquí ninguna lágrima fue falsa,
ni los silencios eternos,
la noche se hizo más bella
y algunas tristezas maravillosas.

Extrañaré como si no estuviesen,
los cuervos que aquí escribí,
sobre la mesa de vidrio y madera.


 Desearía dejar mis penas y sueños
incrustados en las paredes,
en el sofá,
en el armario,
en la mesa de vidrio y madera,
en las baldosas de colores
Y en la puerta doble y blanca
que se abre extensa como las alas de una gaviota

para que el próximo que venga sepa
Que aquí respiró, lloró y amó un poeta.
Jueves 2 de junio de 2011

7 comentarios:

  1. Un lugar amado duele dejarlo
    como duele un amor sustentarlo
    bellas letras amigo poeta
    saludos a la distancia

    ResponderEliminar
  2. Un poeta, me encanta leer algo así,
    "aquí vivió un poeta"
    De entre todos los seres, los únicos capaz de darle vida a los objetos, de rememorar el pasado más cruel aunque eso sea reventarse el alma.
    El único que en la cama contempla una herencia de amor compartido, desvelado, atormentado o feliz.
    Si en algún lugar moran las palabras estás irán acompañadas siempre de poeta que les dará vida...

    ResponderEliminar
  3. Hola Leo, muy impactante tu poema, pero bello, me impactó porque me da la sensación de un testamento, pero es natural, no quisiéramos dejar las cosas que amamos. Es un placer leerte, recibe un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar

Rimel

Luna,
Espejo de mi alma
anhelo inalcanzable
por qué dejas de mirarme
cuando la poesía me abandona